In the night!!!

Un suspiro se escuchaba mientras la noche se encontraba a la mitad, el frio seguia afectando la vista mientras poco a poco la neblina se desataba por aquel parque mesclandose con el panorama, como si algo se escondiese entre aquel lugar, esperando solo para atacar, aquella noche era mas normal que de costumbre, el sonido de las ramas de los arboles al chocar con el aire causaba un poco de tension, solo esperaba que alguna imagen se mostrara en las lejanias.

Conforme avanzaba mas el sonido de aquellos pasos resonaba en aquel lugar haciendome pensar cada vez mas que nada se encontraba a mi alrededor a exepcion de aquellas miradas que presentia estaban sobre mi, el respiro de aquellas criaturas de la noche sobre mi cuello mientras yo solo me dejaba guiar por aquellos presentimientos, al final esperaba eso fuera lo unico que me mantuviese con vida aquella noche.

mmmm.....si estas serca no tiene caso esconderse

Decia esperando algo saltase desde las obscuras calles, no importaba que fuese, era mejor tenerlo serca a mantenerme como si fuese un simple blanco al cual atacar desprevenido.

Tan solo se había puesto a caminar entre la noche, como si nada le importase. Total, ya sabía cómo escapar del peligro y mucho más de pasar desapercibida entre la noche. Aquella luna alumbraba todo el parque... ¿por qué no ir a pasear un rato por allí? Ella pensó que era la mejor idea, antes que quedarse encerrada en ese departamento, mirando el parque. Sin importarle los peligros ni riesgos, salió a la calle y caminó hacia el parque. No entendía por qué nadie estaba en tan hermoso parque... bueno, era nueva en la ciudad. Tal vez por la inseguridad y aquellas leyendas que ya había escuchado, nadie salía a la calle. Sí. Era mejor pensar eso y seguir mirando la luna y las estrellas que adornaban el cielo oscuro.

De repente observó que alguien más estaba en aquella plaza. No lo había visto antes, pero algo le decía que ya lo conocía. Bueno, era mejor irse. Caminó al lado contrario para que aquella persona no la viese. Pero al segundo paso, escuchó la voz de ese tipo.

- Ah, ya me vio... - suspiró y se dijo a si misma. Luego miró al tipo. Ya no tenía sentido ocultarse. Ya la había visto.

- Ya me iba igual. Solo quería ver la luna... - dijo mirando por última vez. - ¿Qué haces tu aquí? Nadie viene por la noche a este lugar... - preguntó, ya dejándose llevar por la curiosidad y espero la respuesta.

Yo? - decia mientras con una sonrisa respondia en forma arrogante- Soy protector de todo lo que aqui ves, asi que puedes mirar con tranquilidad por las noches -se detenia mientras trataba de mirar por completo a aquella chica, la niebla seguia tan densa como al principio lo que le impedia verle desde donde se encontraba.

Pareces extraviada no? -miraba sobre su hombro tratando de mirarla al menos descubrir si era nueva o no en aquella ciudad, saber que era en realidad y tener la situacion bajo control evitando el mayor riesgo para la ciudad.

Escuchó lo que dijo el tipo. ¿Protector? Bueno, no hay de qué tener miedo.

- ¿Extraviada? No lo sé... - dijo como sin seguridad. - Soy nueva en este lugar. No conozco casi nada de aquí... - dijo con tranquilidad mirando la luna. No quería decirle mucho a ese tipo. En cambio, la mirada mucho no le agradaba, no sabía por qué. Luego volvió a mirarlo a él y pensó.

- Eres una especie de policía, ¿no? - preguntó mientras miraba alrededor. Caminó un poco más a donde estaba él. Quería acordarse de la cara, por las dudas. Quién sabe si el día de mañana era un aliado o un enemigo.

mmmm....eres nueva, seria bueno mostrarte los alrededores.... -aquel sujeto se daba media vuelta mirando a una joven de pelo rubio caminando por aquellas calles, parecia normal a simple vista mas no recordaba averla visto pasar, mas no dudaba que fuera invitada tanto como a aquellos monstruos que habian pasado antes por ai.

Dime .....cual es tu nombre -decia mientras guardaba sus manos bajo su abrigo debido a que la temperatura disminuia poco a poco mientras caia mas la noche.

Asi es, soy aquel guardian de estos caminos, nada extraño pasa por aqui mientras yo este a cargo -decia mientras sonreia entrecerrando los ojos con un tono arrogante.

Escucho la amable invitación. La verdad, el tipo parecía amable. Así que bueno, era uno de los protectores. Miro que el la observaba. Ella también hacía lo mismo. No lo había visto la otra noche.

- ¿Mi nombre? Es Yuuki. - dijo sin decir el apellido. No tenía necesidad. Sintió que hacía cada vez más frío. Ya era la madrugada, casi las dos de la madrugada. Ya veía que después no iba a despertarse temprano. Por otra vez, miró la luna y recordó. - Ah, ¿cómo te llamas? - preguntó mientras seguía mirando a la luna. Y luego de escuchar que era el guardián de estos caminos, sonrió. Qué persona más curiosa había conocido.

Una extraña luz resplandecia a lo lejos, como si fuese un relampago iluminando el cielo, aquel sujeto permanecia de pie sin saber siquiera como habia llegado asta aquel lugar, solo recordaba aquellos sucesos en el laboratorio que le habian echo abandonarlo.

Moriran, todo aquel que se me cruce morira Se repetia en su cabeza una y otra ves mientras los relampagos chocaban contra los arboles partiendoles a la mitad, el estremecedor sonido espantaria a quien fuera, total, al fin y al cabo nadie le haria frente al problema.

Ustedes dos........me hicieron esto!!! Moriran - Decia a quienes estaban frente a el, como si a ellos les diera la forma de quienes le torturaron con anterioridad.

Escuchaba las palabras de la joven mientras se acomodaba mas aquel abrigo, el frio estremecia mas la noche a cada instante.

Mi nombre no tiene importancia....solo dime Crow....llebo tanto tiempo en esto que mi nombre se perdio con el tiempo, asi es como me conocen ahora

Su mirada se volvio un poco menos tranquila mientras decia aquella pero siquiera perdiendo su sonrisa, sabia que su labor era conducir a al joven a algun lugar para que descansara a salvo del frio y los peligros que rondaban las noches de la ciudad.
Se acerco a la joven mientras un extraño ruido perturbo aquel momento, un sujeto hacia escandalo frente a ellos mientras pareciera que de su cuerpo salian relampago destruyendo todo a su alrededor

¿Que su nombre no tenía importancia? Bueno, serán algo raro... para ella sí lo era un poco. Reconocer el nombre era importante. Miró hacia la luna por otra vez. Qué frío hacía ese día, la verdad era un frío algo húmedo, y la niebla abundaba en aquel parque. De repente escuchó un extraño sonido a su alrededor. El sonido parecía aproximarse, hasta que vio a duras penas por culpa de la niebla, una silueta de un joven que salían de su cuerpo como rayos y luces. Dio rápidamente la vuelta y miró hacía aquella persona. Hasta que escuchó lo que dijo...

- ¿Eh? - fue lo único que pudo decir, mientras se alejaba lentamente. ¿Quién era ese chico? ¿Por qué dijo eso? Sin miedo ni nada, permaneció mirando hacía el chico. - ¿Quién eres tu? - preguntó sin miedo, ni moviéndose del lugar de donde estaba.

Miraba a lo lejos a aquel sujeto, sin dudarlo se adelanto a yuuki y se ahcerco al menos a 5 metros de aquel sujeto y con una sonrisa en su rostro le señalo hablando con voz firme.

Bien creo que eres nuevo aqui....sabes no es buena idea amenazar a los oficiales de esta ciudad y menos haciendo estragos en mi turno!!!

Su mano se lleno de aquella aura de color marron mientras este se colocaba en una posicion usual para el colocando su pierna izquiera un paso mas adelante.

Bien yuuki, creo que te daras cuenta de como se combate al crimen en esta ciudad..- decia mientras entre cerraba los ojos con una sonrisa muy confiada en su rostro, de momento esta cambio a una algo mas pscicopata mientras se inclinaba un poco- Me encantara destrozarte parte por parte....

Miraba con odio a los dos, mas su mirada se fijo ams en el sujeto que le hacia frente.

Bien....no finjas no reconocerme, tu me hiciste lo que ahorra soy...

decia mientras cerraba sus ojos apretando los dientes, su vista estaba nublada por las memorias del pasado, el odio recorria su mente por completo haciendo que este se exaltara de mayor manera,sus manos empesaron a estremecerse mostrando señales de temblor en ellas, sus ojos al fin se abrieron dejando ver su mirada, aquellos ojos rojos que mostraban un extraño simbolo en ellos, de la nada una especie de trueno empezo a formarse en sus manos mientras el sonido hacia eco en las calles de la ciudad

Miró fijamente a ambos. Sin pensarlo, decidió que era una buena idea quedarse. El tipo ese hablaba de que el otro le había echo algo, ¿hablaba del poder? ¿Quién era ese? De un momento a otro, empezó a fijarse bien en los movimientos de cada uno. Algo le decía que no iba a quedarse sin hacer nada. No hoy.

Y el aura del chico ese, ese joven que recién había llegado. Era un aura negra, llena de odio. Lo mejor, sería tener cuidado.

- Tranquilo, si necesitas ayuda... puedo ayudarte. - dijo mientras miraba fijamente al otro joven. Todavía no sabía bien qué le pasaba. Tal vez el odio le llegaba a hacer confundir las cosas, tal vez eso era. Pero su aura, era totalmente negra.

Luego sonrió. No era lo mejor, pero a Yuuki se le acababa de ocurrir algo.

Ayuda? no creo nesesitarla, no por nada estoy a cargo

permanecia tranquilo sin importar la situacion, el confiaba demaciado en si mismo, tal ves mas de lo debido pero era eso lo que le mantenia tan tranquilo en toda situacion, al igual que aquel sujeto su mirada se torno marron, sus ojos empezaron a crear una ilucion de la cual esperaba confundir al menos un poco al sujeto, de su espalda surgieron un par de alas de color negro asemejandosele a las de un verdadero cuervo mientras que la ilucion se confundia con el entorno, este pareciera el mismo infierno, el fuego llenaba el lugar por completo causando erupciones al menos a 3 metros del sujeto, el calor se intensificaba a medida que el fuego alcanzaba su mayor altura quemando todo a su alredor.

Estas listo? -decia mientras su cuerpo se mantenia envuelto en fuego, sus manos mostraban aquella aura roja afilada cual cuchilla.

De la nada una serie de relampagos causaron estragos en direccion a aquel sujeto frente a el....solo se escucho un grito estremecedor proveniente de misaki mientras este cargaba su cuerpo de aquellos relampagos.

Moriras...... -decia con gran dificultad mientras caminaba un poco hacia ellos mirandolos con odio, aquella mirada desprendia por completo la intencion de matar de aquel sujeto el cual mostraba un odio tremendo hacia los dos presentes.

Quiero que tu cuerpo sufra lo que el mio, desprendere cada parte de tu cuerpo con mis propias manos.

La noche era iluminada por los destellos del cuerpo de aquel sujeto de mirada pscicopata.

Yuuki miró. Estaba pensando ella, qué carajos se le había ocurrido venir a la noche. Ahora todo se había convertido en un lío. Pero, había llegado a algo al menos. Esa persona tan extraña que quería matar a toda costa... en un momento le llegó una curiosidad de preguntar, ¿qué habrá pasado para estar tan ciego de furia y matar a inocentes? Por lo menos ella no le había echo nada. Y no pondría las manos en el fuego por aquel nuevo sujeto que había conocido, que se hacía llamar The Crow. Pensó un poco más. Algo de acción no iría mal hoy, ¿no?

- Bien, no me quedaré aquí parada sin hacer nada mientras él nos juzga... - dijo mientras sus ojos se volvían rojos. Su verdadera naturaleza estaba por ser liberada. Sus ojos empezaban a volverse rojos, tanto así como la sangre. De la nada una mariposa brillante y de color dorada apareció.

- Yo no te he echo nada y no creo que él te haga echo algo... - dijo mirándolo al otro. - Pero si me llegas a tocar, sufrirás las consecuencias. - dijo sonriendo, mientras miraba a su lado a la mariposa que tranquila estaba. Aquellos rayos iluminaban todo el terreno al igual que la tranquila mariposa.

- Farfalla Desire, e si attaccano... - le dijo a la mariposa con una dulce sonrisa, aunque el mensaje no era tan dulce.

No te acerques .... -de la nada su cuerpo se paralizo por completo, al voltear su cabeza no se fijo de aquellos relámpagos que crecieron hacia el, se hinco en el suelo tratando de recobrar el movimiento de al menos su mano, no podía ser que cayera al primer ataque, apretó su mano como pudo y abriendo su ojo miro directamente al chico tratando de infundir aquel terror en el, mostrando le la realidad por medio de las ilusiones, el ver por que aquel chico era afectado al grado de confundir les por completo con desconocidos.

Maldita... sea.... - decía rasguñando el suelo tratando de soportar el dolor, sus alas permanecían alsadas mas su cuerpo seguía sin responderla.

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Vitalidad: 80%

Miraba extrañado a la joven que parecia susurrarle algo al aire, pero esto no le distrajo por completo de aquel tipo de alas negras, la imagen se distorsionaba en su mente conforme pasaba el tiempo mas con la mirada de aquel tipo su mente se despejaba un poco logrando distinguirle de aquellas ilusiones causadas en su cabeza.

Mmmm..... quien eres? - le decía a la joven lejos de el, al parecer ella no parecía en nada a sus visiones, tal ves a causa de aquella mirada, sonreía mientras parecía cobrar la compostura, su cuerpo se estabilizo llevándose consigo los relámpagos que tenia a su alrededor dejando libre a crow.

Soy misaki, y tu? - decía nuevamente esperando así esta le respondiera, no le interesaba aquel sujeto puesto que estaba ahora en el suelo y en si no le parecía en nada familiar a como le había visto en su mente.
Sujeto su espada del mango con fuerza esperando la respuesta no fuera del todo brusca, si así lo era este estaba preparado esperándole, conforme sus ojos giraban en torno a las manecillas del reloj uno de ellos comenzó a sangrar mientras que su mente trabajaba al triple de lo normal, siendo esta la razón de que las ilusiones no le sirvieran contra el, usando disipar, todo volvió a la normalidad y al fin veía todo con claridad saliendo de su obscuro mundo para estar en aquel frió parque.

Miro al joven. Cualquier movimiento en falso, así sea para acercarse, era visto mal para ella. Escuchó la voz ahora del joven, sin mirar a su otro compañero que ahora estaba en el suelo. Sonaba tranquila.

- Soy Yuuki. - dijo algo cortante. - ¿Por qué lo has atacado? Él no te ha echo nada... - preguntó, mientras su mariposa desaparecía en una nube de polvos dorados. Aquella ya se había puesto a trabajar y las sombras estaban apareciendo bajo sus pies. Cualquiera sea su movimiento, no iba a poder salvarse de aquellas sombras. Miró a aquel chico, quien ahora sostenía el mango de la espada.